Para garantizar las propiedades de protección contra el fuego de la puerta, el montaje debe cumplir con las especificaciones y haber realizado la prueba según EN 1634. Además, deben tenerse en cuenta las directrices nacionales e internacionales, las normas, las certificaciones y otros reglamentos pertinentes de la protección contra fuego y humo.
El aislamiento contra la transferencia de calor se garantiza una vez que el material intumescente esté activado.
Los cierrapuertas hidráulicos ocultos no se deben montar en puertas cortafuegos sin las correspondientes medidas de protección ya que:
en el montaje se debe cortar una gran superficie de la puerta y se reduce la resistencia al fuego.
Muchos modelos contienen aceite hidráulico inflamable.
Están fabricados con materiales que transmiten bien el calor.
La carcasa de aluminio se pueden fundir y romper con calor.
Ocupa casi todo el grosor de puerta.